[ OneShot ] Libertad Encarcelada

Os dejo la unica historia que me han premiado,con la que
me pude comprar mi camara jeje,a ver que os parece

Libertad Encarcelada

Aun lo recuerdo aunque de esto ya hace bastante tiempo, fue uno de mis primeros trabajos y uno de los que me dejaron mas marcados. Por aquella época buscaba la oportunidad para demostrar lo que sabía hacer, ese reportaje que me lanzara pero nunca pensé que tuviera que ser así.
El jefe de sección me llamó para enviarme a una casa donde parecía ser se había producido un asesinato y quería que yo me encargara de la noticia, así que cogí mis cosas y me dirigí hacía allí. Cuando llegué ya habían llegado varios periodistas de la competencia y estaba todo lleno de policías como era normal, algo que haría difícil la recogida de datos.
La puerta de la casa se abrió y los fotógrafos prepararon sus cámaras, al igual que yo la mía, para ver salir al supuesto asesino, los flashes empezaron a iluminar el lugar, una larga melena castaña salió de la casa acompañada de tres policías que la llevaban esposada.
Me quedé paralizado al verla, esa mujer estaba llena de moratones, su expresión era triste pero descansada, como si se hubiera quitado un peso de encima. Al final solo pude sacar una foto medianamente buena, cosa que al jefe no le gusto mucho pero me dio otra oportunidad, había conseguido una entrevista con aquella mujer antes del juicio y quería que yo me encargara de la exclusiva ya que, como me enteré poco mas tarde, era la primera mujer que mataba a su marido.
La entrevista se produciría en una semana y en ese tiempo estuve preparando las preguntas que le haría con mucho cuidado, nunca le había hecho una entrevista a una asesina pero sabía que ese reportaje era importante y por ello me esforcé mucho mas de lo que muchos pensarían.
Llegó el día, me dirigí a la cárcel donde se encontraba, enseñé mi permiso en la puerta y tras registrarme los policías me dejaron entrar a una pequeña salita vacía con una mesa y dos sillas, nada más. A los pocos minutos la trajeron esposada y tras sentarse en frente mío el policía que la trajo se quedó en la puerta vigilando.
Hola, me llamo Javier y he venido ha hacerte una entrevista- le dije mientras colocaba mi grabadora encima de la mesa, estaba nervioso y no sabía como romper el hielo, ella ni se inmutó, tenía la cabeza baja y las manos sobre la mesa, pude ver como las tenía moradas y magulladas.
Bien, empezemos, si te sientes incomoda antes algo no hace falta que contestes- al igual que antes no obtuve respuesta- Supongo que la primera pregunta es ,¿porqué lo hiciste?- por fin levantó la cara y pude ver como también tenía la cara hecha polvo y pude ver que aunque se veía joven estaba muy estropeada.
Porqué lo hice, buena pregunta, supongo que ya no aguantaba mas, tomé la salida fácil y le devolví todo lo que me había hecho- contestó sin expresión alguna.
¿Qué quieres decir?- le pregunté para sacarle mas información aunque las cosas estaban muy claras.
Muy sencillo, llevo once años soportando sus malos tratos, por cualquier cosa y sin ayuda de nadie, por mas que denunciaba solo conseguía que me pegara mas-contó tristemente.
¿Y antes de casaros era así?
No, jamás me puso la mano encima, pero me quedé embarazada y tuvimos que casarnos, aunque no se porque ya que a los pocos días me empezó a pegar hasta que hizo que perdiera al niño, quise dejarlo pero le quería, y a veces se le veía tan arrepentido que no podía dejarle aunque tendría que haberlo hecho...y así ahora no estaría en esta situación.
Siguió contando como le conoció, todas las veces que tuvo que ir al hospital porque le rompió algún hueso y también que tuvo dos abortos más y encima le echaba la culpa a ella de que perdiera a los bebes, con cada frase que decía pensaba que lo que había hecho no estaba tan mal, estaba sola y desesperada, y en ese momento de desesperación le clavó un cuchillo, él la miró extrañado sin entender porque hacía eso pero ella ya no podía parar..al final la encontraron llorando sobre el cuerpo inerte de su opresor.
Se acabó el tiempo-nos anunció el policía que estaba en la puerta.
¿Ya?- pregunté extrañado, se me había pasado el tiempo volando- Bueno ya tengo datos suficientes, muchas gracias por la entrevista.
De nada- ella se levantó y fue hacía la puerta, acompañada por el policía.
Espero te tengas suerte- le dije antes de irme- y estoy seguro de que este reportaje ayudará a otras mujeres que estén en una situación similar a la tuya.
Eso espero- en su rostro apareció una débil sonrisa.
No mucho después de salir el reportaje se supo la sentencia, la habían condenado a quince años de cárcel, el hecho del maltrato la había ayudado a que fueran menos. Había salido de una cárcel para meterse en otra aunque por lo menos ya podía respirar tranquila, ya nadie le haría daño.